BODEGONES
En esta serie exploro el contraste entre la quietud de los objetos y la presencia fugaz de cuerpos en movimiento. Esta figura que aparentemente no es el foco principal, se desdibuja y acapara la escena donde la intimidad cruza el fondo sin detenerse. Esta tensión entre lo estático y lo dinámico me generó una atmósfera viva, donde el paso del tiempo se volvía visible, invitándome a mirar lo inmóvil como testigo del presente que se escapa. Entonces, no están ni aquí ni allá, ni en el lugar que ocupan ni en el que están por ocupar. Son presencias transitorias, apenas sugeridas.Nada es lo que parece, nada está quieto de verdad.